El juego ha demostrado ser una de las mejores estrategias para que los niños aprendan. Descubre en esta nota porque es tan importante y cómo ponerlo en práctica.
El aprovechamiento del tiempo libre es muy importante a la hora de gestionar las actividades de los más pequeños. La recreación hace referencia a ese espacio en el que el entretenimiento toma el papel protagónico y les permite a los niños explorar el mundo bajo sus propias reglas.
Importancia de las actividades recreativas para niños
De acuerdo con UNICEF, el juego ha demostrado ser una gran estrategia a la hora de lograr que los niños apropien conocimientos y desarrollen habilidades necesarias para su interacción cotidiana.
En este sentido, lo que observan, las personas con las que interactúan y las imágenes que reciben hacen que puedan sentirse apoyados y con la confianza necesaria al momento de emprender acciones por sí mismos.
En relación con lo anterior, los cuidadores tienen un papel principal al ser los encargados de brindar un cuidado consciente, estar atentos ante cualquier elemento que pueda interferir en su crecimiento y, por último, asegurar que los niños podrán contar con ellos tanto en situaciones positivas como aquellas que representen algún tipo de dificultad.
Por eso, las actividades recreativas para niños, al suceder en la cotidianidad, hacen parte de cómo resolver un conflicto o encontrar una solución práctica en un momento de crisis.
Características de las actividades recreativas para niños
El juego, sobre todo cuando está pensando para los más pequeños, no se elabora a través de reglas o parámetros establecidos. De hecho, hacerlo bajo normas muy estrictas hace que pierda el sentido de diversión que trae consigo. Con este panorama, cuando hablamos de actividades recreativas nos referimos a acciones que son:
Creativas
Cuando los niños se sienten en confianza, son más propensos a explorar su entorno sin restricciones y sin ningún tipo de razonamiento lógico. Esta libertad en lo que opinan y las historias que recrean les permite desarrollar pensamientos innovadores, fuera de la caja y novedosos.
Expresivas
El papel que asume cada pequeño en un juego representa como son sus intereses y qué tanto nivel de interés tiene frente a un rol en específico. Por eso, es fundamental tener en cuenta cómo lleva a cabo su comunicación con el objetivo de identificar si tiene un perfil extrovertido o introvertido.
Espontáneas
Se trata de hacer del juego algo realmente divertido. Por eso, al momento de realizar esta actividad junto a ellos, es importante dejar las reglas de lado y optar por acompañarlos, la idea es que sea placentero y no visto como una obligación.
Ahora que tienes claro lo que caracteriza a una actividad recreativa, hablemos de los ejercicios de recreación que te ayudarán a compartir tiempo de calidad con tu pequeño, además de divertirlo e invitarlo a aprender e interactuar con su contexto en particular. Para lograr esta meta es necesario segmentar los juegos según la edad o las capacidades o habilidades que quieres desarrollar pues a medida que los niños van creciendo, adquieren capacidades distintas.
Actividades para compartir con los padres en cualquier momento
La mayoría de las habilidades necesarias para que los niños crezcan saludablemente, tienen que ver con identificar peligros y reconocer quienes son sus cuidadores. Con respecto al último punto, es prioritario fomentar un vínculo de cercanía, empatía y protección entre las figuras paternas y los pequeños. Algunas actividades que te recomendamos desde MILO® son:
1. Cantar
Haz que la hora de la cena sea mucho más amena entonando melodías que capten la atención de tu hijo, puedes intentar con canciones educativas con las cuales podrá aprender letras, números o animales.
2. Juegos de articulaciones
Los niños suelen responder a los estímulos que les son conocidos. Por eso, es una buena idea es impulsar el movimiento de sus articulaciones a través de actividades de adivinanza como “¿Dónde está?”. Por medio de ellas ejercitará sus manos y dedos aprendiendo a señalar e identificar objetos o personas.
Actividades recreativas en interiores y exteriores
Cuando los niños adquieren mayor comprensión sobre sus capacidades y su papel en el mundo, es normal que deban desarrollar conceptos adicionales como el del compartir con los demás.
De hecho, es usual que dentro de su vocabulario incorporen palabras como “mío” y “yo”. Teniendo en cuenta este panorama, algunos juegos que puedes poner en práctica son:
1. Juguetes interactivos
Existen alternativas en el mercado que están hechas para enseñarle a resolver problemas, trabajar en la toma de decisiones y estimular su independencia. Los que cuentan con elementos llamativos como luces, sonidos, entre otros, favorecen a que se anime a hacer actividades por su cuenta.
2. Formas y figuras
Los rompecabezas o las tazas y recipientes que se anidan con diferentes tamaños son una excelente forma de enseñarle al niño cómo se colocan las piezas en diferentes lugares y de qué manera se pueden clasificar. Al momento de jugar, procura describir las formas, por ejemplo: “la caja es rectangular” o “la pelota es redonda”.
3. Encontrar letras
Cuando salgas a dar un paseo con tu hijo invítalo a señalar la letra y haz que al repetirla reconozca su sonido. Así, en elementos de su vida cotidiana como las señales de tránsito, los carteles de los locales o los avisos de las tiendas, podrá reforzar su lenguaje e incluso, más adelante, trabajar en la pronunciación de cada palabra.
Actividades recreativas para niños de 6 a 8 años
Los niños que están próximos a comenzar la etapa escolar, se encuentran en una fase donde la exploración con sus sentidos toma mucha relevancia. En los juegos que se planteen es necesario realizar una estimulación extra con diversos elementos que capten su atención por un periodo de tiempo prolongado.
1. Cocinar
Esta actividad fomenta los nexos entre los cuidadores y el niño, pero además le enseña características adicionales que hay que tener en cuenta como la organización, la planificación, y la atención al detalle.
Dichas habilidades, en conjunto, tienen un papel fundamental a la hora de preparar recetas deliciosas. Además, es la oportunidad perfecta para que exploren juntos sabores únicos o combinaciones a las que no se han atrevido antes. Acompáñalo de una bebida MILO® para que sea aún más divertido y nutritivo.
2. Juegos para detectar la diferencia
Al interactuar con personas distintas a él, el niño debe comprender que hay determinados rasgos en el cabello, la piel, la estatura, entre otros que distinguen a cada uno dentro del grupo.
En este sentido, juegos como el de “Adivina quién” pueden ayudarlo a describir e identificar qué lo hace diferente a los demás y por qué debe valorar la diversidad.
3. Diario de observación
Durante esta época, los niños mayores disfrutan de observar y comparar varios elementos de su entorno. Para que esta actividad sea aún más lúdica puedes invitarlo a construir un cuaderno donde anote lo que vio acompañándolo de una imagen de lo que observó.
Para el pequeño, será valioso sentir que comparte esta actividad con sus cuidadores y que ellos lo integran en sus tareas cotidianas.
¿Listo para darle a tu campeón momentos únicos? ¡Pon en práctica estas actividades y añádele un delicioso vaso frío o caliente de MILO® en polvo, el único con ACTIV-GO®! Recuerda que lo más importante para su crecimiento es demostrarle que tiene todas las capacidades para lograr cada uno de sus sueños. Acompáñalo durante su proceso y crea junto a él experiencias únicas que, estamos seguros, no olvidará.
Fuentes
https://www.redalyc.org/pdf/440/44025210.pdf
https://www.clinicalascondes.cl/BLOG/Listado/Pediatria/importancia-recreacion-desarrollo-ninos